El mapeo de ecosistemas sanitarios
Innovar en el sector salud es retador por tratarse de un sistema de alta complejidad que requiere de un amplio conocimiento y expertise. Por eso, el primer paso consiste en estudiar a profundidad el ecosistema sanitario. El mapa de ecosistemas de salud es una de las herramientas más valiosas para visualizar y comprender las características propias de cada país que forma parte del Movimiento Salud 2030, y así definir cómo lograremos impactar priorizando los siguientes pasos basados en las brechas y oportunidades detectadas dentro del sistema, así como los actores relevantes para alcanzar el objetivo.
¿Qué es un mapeo de ecosistema?
En los mapas de los ecosistemas nos enfocamos en identificar a los diferentes actores y entender su rol visualizando el intercambio de valor y las interacciones entre ellos para encontrar oportunidades de intervención.
Con este mapeo de ecosistema, se busca comprender el estado actual al entender al paciente, los procesos, las instituciones, las herramientas y los recursos de información a los que se tiene acceso y sus usuarios; es decir, todas y cada una de las interacciones que ocurren entre sí; y dónde y cuándo se genera el valor a través del sistema.
Mapeando los ecosistemas en Movimiento Salud 2030
El mapeo del ecosistema en Movimiento Salud 2030 ha sido una herramienta introducida por Board of Innovation uno de nuestros partners, con el objetivo de entender el ecosistema de cada país y ser el punto de partida que facilite la identificación de oportunidades para innovar en el sistema de salud. Dichas oportunidades surgen como respuesta a la problemática actual, es decir necesidades no resueltas y dolores que experimentan los actores del sistema, principalmente los pacientes.
En una sesión de mapeo de ecosistema buscamos obtener como resultado una visión instantánea del sistema de salud local que describe quiénes son los aliados clave que podrían estar interesados, cuáles son sus roles y cómo opera el sistema en función de una área de foco específica.
Nos ayuda con la planificación estratégica cuando se logra comprender:
Cuál es el papel de las instituciones en el sistema en el que opera.
Posibles oportunidades de asociación público-privada.
Oportunidades para desarrollar innovaciones que aporten valor en el sistema.
Definición de la estrategia de acceso al ecosistema mediante la identificación de actores clave.
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¿Cómo lo hacemos?
El mapeo de ecosistema se construye con la participación de un equipo multidisciplinario que conoce cómo funciona el sistema y los retos a los que se enfrenta, haciéndolos partícipes de una sesión en la cual se tiene la oportunidad de discutirlo y ver los diferentes puntos de vista desde el conocimiento y la experiencia de cada uno de los participante.
Para este mapeo utilizamos la herramienta Miro en dónde después retroalimentamos con expertos el funcionamiento e interacción de los actores. Los pasos para construir un ecosistema son:
1. Identificar todos los actores y entidades involucradas en el suministro y la provisión de la atención. Es importante analizar a profundidad el ecosistema y detectar aquellos actores que no están relacionados directamente con brindar servicio, pero sin embargo impactan su funcionamiento y eficiencia.
2. Organizar las diferentes entidades y actores que conforman el ecosistema. Una vez que se tienen mapeados se comienza a trazar líneas que representan las conexiones y cómo interactúan entre ellas. Estas líneas pueden representar las acciones que realizan las entidades o incluso los datos que comparten con el objetivo de comprender quién crea, entrega y captura valor en todo el ecosistema.
3. Retroalimentar el ecosistema una vez mapeado para verlo como un todo y asegurar que esté completo y no falten actores que puedan resultar relevantes. Para lograr que esto sea posible se debe validar que el ecosistema está representado tal cual funciona actualmente y que representa el país o región que se está mapeando.
4. Resaltar las brechas y oportunidades que existen dentro del ecosistema. Esto ayudará a comprender qué aspectos deben explorarse a profundidad y en cuáles se puede mejorar. Para que está información sea relevante debemos analizar el ecosistema con diferentes expertos en su funcionamiento y con una visión real de lo que sucede actualmente entre las instituciones y con el paciente. Es sumamente importante contar con diferentes puntos de vista para poder tener una idea de cómo funciona en su totalidad.
3. Comprender cómo podemos innovar en el ecosistema e implementar soluciones sostenibles en el tiempo que impacten el sistema de salud, con el fin de aumentar su eficiencia y efectividad.
Mapear un ecosistema y definir la estrategia basada en este mapeo puede parecer complicado, pero es cuestión de reunir a personas con diferentes perspectivas para conocer a mayor profundidad cómo funciona el sistema y así detectar las oportunidades más relevantes. Podemos entender un mapeo de ecosistema sanitario como una representación sintética que captura todos los actores clave y sus roles influyendo en la atención que recibe el paciente.
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